Culminaron las actividades de la Acción de extensión Discursos en torno a la agenda ecológica que llevaron adelante las cátedras Corrientes del Pensamiento Contemporáneo (Licenciatura en Comunicación Social), Gestión de lo Cultural y Producción en Lenguajes II (Tecnicatura en Gestión Cultural) y Psicoanálisis y Educación (Licenciatura en Ciencias de la Educación).
Agenda ecológica y sociedad civil fue el título del panel realizado el martes 17 de octubre, en el Auditorio «Rodolfo Walsh» de la FCEDU-UNER, donde participaron organizaciones ambientalistas de Paraná y Santa Fe. Como apertura de la actividad, se desarrolló una performance y la proyección de un corto de producción local.
Una máscara de pajarraco confeccionada en materiales reciclables se abrió paso en el escenario de la sala mientras una voz clara recitó un poema, con perspectiva ambientalista, sobre el Paseo Jardín de Paraná. Las protagonistas de esta puesta fueron Consuelo Badaracco Berduc y Laura Sánchez Olivera, directoras del corto Oeste Cercano, que luego de su intervención en vivo fue estrenado ante el público presente.
La realización se filmó en los humedales del Paraná y propone una exploración, a través de la danza, de la frontera entre naturaleza y sociedad y, a su vez, de la conexión inextricable entre una y otra. Los cuerpos de las protagonistas entretejidos con el paisaje vivo y la chatarra expresaron la dialéctica entre el mundo y la cultura contemporánea.
La pieza audiovisual dio pie al panel compuesto por activistas ecológicos de la región: Daniela Verzeñassi, representante del Foro Ecologista de Paraná; Elías Sigura, guardaparque del islote Curupí e integrante de A Ñangarekó Nderehé y Angelina Rodríguez, de la Asociación Civil Capibara de Santa Fe. Cada uno, desde su perspectiva, manifestó las cuestiones y las luchas que los ocupan.
Por su parte, Angelina hizo énfasis en la deuda que Argentina tiene en comprender la naturaleza como sujeto de derecho, y dijo que “a nivel latinoamericano, Ecuador y Bolivia tienen declarado en su constitución que la naturaleza tiene derechos, lo cual tiene mucho poder”. Además, sostuvo que “respetar los derechos de la naturaleza no implica dejar las áreas protegidas como sectores intocables para vislumbrar un paisaje, sino que implica considerar los ciclos biológicos, sus recursos finitos y entender que existe como alternativa posible y necesaria el modelo agroecológico”.
Daniela agregó que “la transición a un modelo agroecológico no es posible si no hay políticas públicas que acompañen tanto económica como técnicamente a los productores”. En cuanto a las labores que llevan a cabo desde el Foro se refirió a las marchas en contra de la fumigación con agrotóxicos que este año llegaron a las 300: “Celebramos haberlas podido sostener, pero lamentamos aún tener que estar rondando. Dijimos que íbamos a rondar hasta que cambie el modelo de producción, esto es un indicador de que las cosas no están bien”.
Elías contó su trabajo como guardaparque: “estoy involucrado en ser el vínculo entre naturaleza y sociedad”. Además, agregó: “Es un proyecto central en la isla trabajar con la educación ambiental. Se está por construir un centro interpretativo para que no sea solo un lugar atractivo paisajístico visual, sino que también esté la parte cultural, histórica y museológica”.
Luego de estas intervenciones hubo lugar al debate y el intercambio que abonó una reflexión colectiva sobre los temas expuestos. De esta manera se desarrolló el último encuentro de la Acción de extensión Discursos en torno a la agenda ecológica que llevaron adelante las cátedras Corrientes del Pensamiento Contemporáneo (Lic. en Comunicación Social), Gestión de lo Cultural y Producción en Lenguajes II (Tecnicatura en Gestión Cultural) y Psicoanálisis y Educación (Lic. en Ciencias de la Educación).
Esta iniciativa tuvo como propósito contribuir al debate sobre la crisis ecológica en curso propiciando un acercamiento al tema a partir de la sensibilización y la participación en la defensa del derecho humano a un ambiente sano.
En este sentido, se llevaron adelante otras proyecciones de películas sobre la relación humano-naturaleza en distintos ámbitos de las capitales provinciales mencionadas.
La iniciativa contó con el apoyo de las organizaciones Foro Ecologista, Capibara, A Nañgarecó Nderejhé, Biblioteca Caminantes, Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) seccional Paraná, Cineclub Musidora y grupo cinéfilo Relámpago Verde.