El canal de televisión abierta fundado por Edgardo Sánchez, comenzó sus transmisiones el 2 de mayo de 1992. Hoy, Canal Once es un importante medio local y regional que ha expandido su radio de acción incorporando un portal online de noticias y la transmisión en vivo por YouTube. Sus programas han sido nominados y galardonados en los premios Martín Fierro Federal, los de la Asociación Entrerriana de Telecomunicaciones (AET) y los premios ETER para radio y televisión. En el 30º Aniversario de su creación, recuperamos experiencias de la comunidad graduada de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UNER, que ha sido protagonista de la historia del canal.
Andrea Fercher ingresó a Canal Once en 1994, «a través de una charla que organizó la facultad, a la que fueron medios de comunicación de la ciudad y dejaron abiertas las puertas para que nos acerquemos. En ese momento se iniciaba una relación institucional con estos medios para que los estudiantes de los últimos años podamos hacer nuestras pasantías», es decir, las actuales prácticas curriculares. «En ese momento yo pensaba que la tele me gustaba y después de transitar los primeros días, me di cuenta de que era lo que quería hacer el resto de mi vida», sintetiza Andrea.
Una vez que terminó el periodo de práctica, automáticamente se transformó en su primer trabajo. «Siento que fue un aprendizaje mutuo: el canal respecto de poder incorporar a egresados de una universidad, no había otros hasta ese momento; y también de mi parte, porque como sabemos la universidad nos da conocimientos, capacidades, herramientas que uno tiene que ir aprendiendo a manejar y a utilizar mientras camina, ¿no? Eso tan magnífico que te da la experiencia», remarca.
Egresó de la Licenciatura en Comunicación Social de la FCEDU con una tesis que se tituló «Construcción del discurso informativo de Canal Once de Paraná y la modalidad de interacción con su audiencia». En este sentido, Andrea Fercher reconoce: «Investigué, trabajé y concluí en torno a los alcances y características tan particulares del canal, que tienen que ver con los lazos que los televidentes tenían y siguen teniendo. Es un lugar como comunicador de muchísima responsabilidad, así lo sentí siempre, porque los vecinos, los referentes de las organizaciones, los dirigentes de distintas entidades, antes de llamar a la policía, a las autoridades municipales o provinciales, a los bomberos, llamaban a Canal Once. El teléfono 4313186, para los vecinos, era una necesidad. Ese fue el primer lema que tuvo el canal. Surgió para cubrir ese lugar de medio de comunicación cercano a la gente. La gente quería saber el clima de acá, cuándo cobraban los trabajadores de la municipalidad o de la provincia, sobre el choque que pasó en la esquina de su casa, no en la Plaza de los Dos Congresos».
«Pude vivir y hacer carne principios que en la facultad fuimos incorporando desde primer año –añade–. Cuestiones como buscar la información de las fuentes, poder oír todas las voces y campanas de un mismo tema, más allá de las ideas, las convicciones, las creencias que uno pueda llevar como periodista o como comunicador». En este sentido, Andrea tuvo la tarea de transmitir su experiencia y «coordinar un grupo de pasantes, que así como yo, se acercaron al canal, y que aún hoy están trabajando en distintos lugares estratégicos y de responsabilidad del canal».
Para terminar, Andrea Fercher sintetiza: «Hace pocos días el Canal cumplió 30 años y yo me siento parte de esa historia porque yo trabajé, me formé, hice amigos, relaciones, y tantas otras cosas en más de veinte de esos treinta que cumple. El Once surgió como una necesidad y estoy absolutamente convencida de que sigue ocupando ese lugar para todas y todos los ciudadanos de Paraná y, desde que aumentó su llegada, de toda la provincia».
Fernanda Amembi es Técnica en Comunicación Social con especialización en Redacción y desde hace 17 años trabaja en la producción de noticias de la mañana. «Nuestro canal le da mucha importancia a las historias y las opiniones de la gente sobre los temas cotidianos y es desde ese lugar que muchas veces surgen las noticias más vistas o más comentadas. A la hora de aportar ideas estamos todos. Es muy común que fuera de horario avisemos si vemos un accidente, presencia policial, un evento social o deportivo. Somos, en esencia, cronistas las 24 horas, los cámaras, los movileros, los productores, los técnicos», asegura Fernanda.
Su función, actualmente, es la «coordinación de los tres móviles en vivo que salen en el programa que esté al aire en ese momento y la edición de esas notas para el compacto de tres horas de 12:00 a 15:00, Mediodía de Noticias. Armo los guiones generales y pauto el orden de salida en bloques». Fernanda reconoce: «Para la teleaudiencia soy anónima, no salgo al aire. Pero he editado videos que tienen más de un millón de vistas. Y desde mi función trabajo en un lugar donde lo importante es la noticia y la forma en la que la contamos».
Entre las vivencias o las anécdotas que siempre recuerda, remarca dos: cuando «una importante fábrica de muñecas nos mandó una muñeca con características especiales para que se la llevemos a una nena que la había perdido y la extrañaba»; y la oportunidad en que «un trabajador del San Roque fabricó un ojo de vidrio para un nene que lo había perdido en un accidente doméstico. Le cambió la vida con 7 años».
Washington Varisco, por su parte, trabaja hace 22 años en el canal. «Conduzco hace cuatro años el noticiero y, desde hace 20 años, mi propio programa de deportes. También hice un programa cultural musical con Orlando Vera Cruz y uno de investigación periodística durante dos años».
Destaca que, de la FCEDU, se llevó ya desde la etapa de estudiante «una formación integral con mucho conocimiento teórico para desarrollar mi profesión, como sostén de la situación práctica en el propio ejercicio. Me dio un bagaje cultural muy importante el paso por la universidad».
«Trabajar en Canal Once, primero, es un orgullo y, segundo, es una satisfacción precisamente por lo que genera en la región, esa identificación, ese ida y vuelta con los y las televidentes es algo magnífico; y es la esencia de esta señal. Siempre decimos que estamos donde la gente quiere que estemos», dice para terminar.
Ayelén Herbel es Licenciada en Comunicación Social y trabaja en el canal desde 2012. Empezó en la redacción de la página web y con el tiempo comenzó a realizar otras actividades relacionadas a la televisión. Actualmente co-conduce el programa Nunca es tarde, que va de lunes a viernes de 9:00 a 12:00. En el verano participó de los programas Modo verano y A media mañana.
Cuenta que hizo gran parte de la carrera estudiando y trabajando a la vez, «algo que me ayudó bastante porque pude ir combinando y contrastando las dos partes, lo que es la facultad con lo que es trabajar día a día con la comunicación».
En relación a la experiencia en el canal, Ayelén detalla que «todo el tiempo se está vinculando la página web con la televisión, en un trabajo mancomunado entre ambos sectores y, obviamente, con la calle y los móviles. Se trabaja en conjunto, mas allá de que cada persona tiene su área específica; siempre haciendo hincapié en el vecino, en la gente. Eso caracteriza a Canal Once: es el canal de la gente, de hecho muchas noticias surgen a partir de mensajes, comentarios e inquietudes de la gente».
Anabel Saavedra empezó a trabajar en Canal Once hace exactamente diez años, en mayo de 2012. Primero en la web elonce.com, «haciendo dos micros, que se realizaban con noticias de la página para el interior de la provincia. Eran informativos que se emitían cada media hora». Luego, empezó a hacer móviles exteriores por la mañana: «Ya trabajando en radio había comprobado y corroborado que exteriores era lo que más me gustaba, por la relación directa que te da con la gente. El servicio que brinda el canal es con lo que más identificada me siento».
Anabel reconoce que ese contacto con las personas, además, permite cambiar realidades. Recuerda una experiencia: «Estaba en la Plaza Sáenz Peña haciendo un móvil y un hombre en situación de calle esperó a que terminara la nota y se me largó a llorar pidiéndome que lo ayude, que nadie le respondía dónde él podía ir a dormir, que tenía un problema de salud y le había afectado mucho dormir en la plaza. Inmediatamente empecé a llamar a cada uno de los organismos o responsables de cada área, que conocía gracias a tener mi agenda, que también es parte de lo que he podido generar trabajando en el canal».
Ese día, consiguió la respuesta del Hospital San Martín, que lo recibió por el dolor físico que presentaba. «Hasta ese momento me quedé como con un sinsabor porque sentía que no había hecho mucho, más que decirle que vaya al Hospital. Al otro día estaba haciendo una nota en zona céntrica y siento que me tocan el vidrio del auto. Era el hombre con una sonrisa de oreja a oreja, quería agradecerme porque había conseguido donde dormir y en el Hospital lo habían recibido, lo estaban esperando. Me quedé con eso, con lo que uno puede lograr desde un medio de comunicación. Siempre tomo mi trabajo desde esa perspectiva y lo relaciono con lo que el canal significa para la ciudad y desde lo que el canal puede lograr a partir de su impronta y de su vínculo con la gente», termina Anabel.
Fecha: 23/5/2022