“En el ejercicio de los derechos a la cultura los ciudadanos, como sujetos sociales y políticos, se diferencian, entran en conflicto, se comunican e intercambian experiencias, rechazan formas de cultura, crean otra nuevas y movilizan todo el proceso cultural”
Marilena Chaui
Por el Lic. Juan Manuel Giménez – Secretario de Extensión y Cultura – FCEDU-UNER
Hemos asumido nuestra tarea en estos años de gestión en la consideración de que las carreras troncales de esta unidad académica remiten a los campos de la educación y la comunicación social. Entendemos que ambos campos tienen sus raíces epistemológicas en el terreno cultural y que las consecuencias de la acción de los educadores y los comunicadores sociales, como trabajadores, son político-culturales. Somos trabajadores de la cultura.
Desde la Secretaría de Extensión y Cultura de la FCEDU desarrollamos toda nuestra actividad, entonces, desde la concepción de activación de derechos culturales.
Por otra parte, observamos a lo largo de estos años en una gran cantidad de proyectos de extensión de nuestra Facultad cuya tarea central consiste en generar espacios de expresión y entornos creativos donde se tramitan las configuraciones de las diversas subjetividades (jóvenes, de género, adultos mayores, en situación de encierro, de salud mental, etc., etc.). Precisamente las acciones y actividades de estos proyectos intervienen activando derechos culturales. En estos espacios:
- Se habilita la expresión a través de diversas formas
- Se genera y regenera lazo social
- Se activan procesos identificatorios (identitarios)
- Se configuran sentidos de pertenencia social
- Se trabajan las memorias
- Se produce desde la dimensión estético simbólica
Vemos a nuestros docentes, estudiantes y egresados desarrollando sus intervenciones como gestores (generadores, creadores) de ámbitos de tramitación cultural, espacios de desarrollo de procesos de simbolización, de expresión sociocultural en escuelas, en medios de comunicación, pero también y mucho en organizaciones de la sociedad civil, en centros culturales, centros vecinales, centros de salud, en áreas culturales del estado, en grupos autogestivos, en empresas privadas, etc.
En nuestra unidad académica se implementó en el año 2016 la Tecnicatura en Gestión Cultural, después de un largo proceso que tuvo sus primeros pasos en 2007, con la aprobación del plan de estudios. En estos dos años –detectando una necesidad importante en la región– tuvo un amplio y fructífero desarrollo y su último logro ha sido la organización de las 1º Jornadas de Gestión Cultural “Gestando vínculos para el trabajo y la creación cultural» realizadas el pasado jueves 2 de noviembre
Hoy nos encontramos muy gratificados por la realización de esta Jornada. Tanto por su resonancia externa como por la alegría y fortaleza del grupo organizador y gestor de la misma, estudiantes y docentes de la Tecnicatura aunados en el desarrollo de un trayecto y en procura de un propósito de intervención que trasciende el “nicho” de una oferta formativa.
Poder compartir el entusiasmo y el compromiso con el que se trabaja desde aquí refuerza el sentido de la universidad pública, activando instancias de transformación social.
Esta Jornada es la gestación de un espacio común para la reflexión y acción en el campo de la cultura. Basta ver la programación de la misma y su efectiva realización para apreciar la diversidad de acciones y modos de intervención de los gestores culturales, lo que amerita su continuidad.
Un último aspecto que quisiéramos remarcar en este momento –histórico, como todo momento– es poner el acento en que muchas veces naturalizamos ciertas construcciones de sentido como la de “gestión cultural”. Parecería que esta construcción (sustantivo / adjetivo) diera por supuesto un sentido establecido, naturalizado de gestión. A modo de inquietud nos gustaría plantear, poner en discusión, invirtiendo los términos, la cultura de la gestión.
Aquí hay sentidos en disputa. Hoy más que nunca, en tiempos de destitución de lo público, de pérdida de conquistas de derechos y de una avanzada y ofensiva de la ideología de mercado como parámetro y patrón de sentidos, de tanto gerenciamiento, management y “ceo” en acción en la escena pública, se hace imprescindible formular la pregunta de para qué, para quién y cómo se gestiona.
Desde nuestra concepción, nos remitimos a la idea del especialista peruano en estudios culturales y políticas culturales Víctor Vich, de abordar la Gestión Cultural como forma de acción política. En esta forma pujan lo instituido y lo instituyente.
La transformación sociocultural y la vitalidad de nuestra acción política, en tanto Universidad Pública, estará nutrida por el modo que tome esta puja.
Fecha: 7/11/17